El acné está condicionado por factores genéticos, hormonales y ambientales. Con relación a los factores hormonales, se ha observado aumento de andrógenos y, en los ambientales, el consumo de dieta con alto índice glucémico (IG) como el chocolate o la leche (y sus derivados), pueden aumentar las lesiones. El IG se mide del 1 al 100 y representa una medida de la rapidez con la que un alimento puede elevar su nivel de azúcar (glucosa) en la sangre. En general, los alimentos con un IG bajo aumentan lentamente la glucosa en su cuerpo y los alimentos con un IG alto, incrementan rápidamente la glucosa en la sangre En la literatura médica se ha reportado que dietas con alto contenido glucémico aumentan los andrógenos y contribuyen a presentar lesiones de acné o empeoran las lesiones preexistentes. Por lo tanto, la dieta mediterránea que se caracteriza por alimentos con baja carga glucémica, poca cantidad de alimentos lácteos y abundancia de nutrientes con propiedades antioxidantes y antiinflamatorias como las frutas y verduras, pueden disminuir el acné.
